Apartamentos en Oliva

La localidad de Oliva destaca en la costa valenciana por ofrecer tanto destinos de playa como de montaña, una dualidad que se refleja igualmente en su gastronomía. Y es que en las fogones olivenses los productos de la huerta se mezclan con los del litoral, dando lugar a platos deliciosos como la pebrera farcida o las gambas con acelgas.Lo que no falta en las cocinas de esta localidad valenciana es el arroz, elemento omnipresente en las Jornadas del Arroz que se celebran en el mes de febrero y que forma parte ya de las fiestas del arroz típicas de Valencia. Comer bien, se come, independientemente de la época del año, pero está claro que para probar los sabores tradicionales de la zona hay que buscar un alquiler de temporada en Oliva cuando la primavera empieza a asomar la cabeza.

Apartamentos vacacionales en Oliva

Aunque despedir el invierno junto a los olivenses es una opción, existen bastantes razones para buscar alojamiento en Oliva en cualquier momento. El circuito de karts (único no solo en la ciudad, sino en la provincia) es uno de esos reclamos fuera de temporada, ideal para pasar una tarde con la familia o los amigos. Una visita que se puede aprovechar para descubrir el cercano parque natural de la Marjal. Igual de 'atemporales' son las joyas patrimoniales de Oliva, siendo la de mayor valor el castillo de Santa Ana. Acercarse a la fortificación es lo más parecido a viajar en el tiempo para conocer como la santa se convirtió en el centro de la vida de los olivenses, denominando incluso el monte donde renació la ciudad hace más de 500 años.

Alojamiento en Oliva

Los apartamentos en Oliva sitos en el centro son perfectos para conocer a fondo la ciudad, pero siguiendo el canal de las Fuentes en su camino hacia el mar hay muchos más. De hecho, son la alternativa para los que buscan un entorno más playero, sobre todo si se trata de las urbanizaciones cercanas al club náutico como las de Canyaes, Aigua Blanca o Bomba.Se trata de un complejo urbanístico a los pies del Mediterráneo donde bloques de pisos conviven con unifamiliares y chalets. Evidentemente, es la opción acertada para realizar planes que incluyan desayunar a la orilla del mar, degustar tapitas en la playa, practicar deportes acuáticos y tomar el sol todo el día.