Qué hace especiales a los apartamentos en Alicante
Alicante es uno de los destinos españoles más visitados gracias a su clima excepcional, a su creciente oferta lúdica y a su extensa línea de playa. El alquiler de temporada en Alicante permite acceder tanto a los puntos más concurridos de la costa como a los tesoros patrimoniales que se encuentran en las montañas cercanas. Una dualidad casi mágica que ha seducido a numerosas civilizaciones y que brinda fotografías excepcionales.
Qué ver gracias al alquiler de apartamentos en Alicante
Las dos grandes playas de Alicante son las del Postiguet y San Juan, siendo la primera de ellas la más frecuentada y la más próxima al centro urbano. Frente a ella se localiza la Explanada de España, una agradable y prolongada zona de paseo debidamente resguardada por densas hileras de palmeras. Lógicamente, todas estas visitas pueden llevarse a cabo cómodamente desde las numerosas opciones de alojamiento en Alicante. Otro importante punto de encuentro es la Plaza de los Luceros, la más célebre de la ciudad. Igualmente simbólico resulta el casi centenario Mercado Central.No muy lejos del centro de la ciudad, el gran activo patrimonial de Alicante es el Castillo de Santa Bárbara que corona la urbe desde su privilegiada atalaya natural en el monte de Benacantil. La fortaleza ofrece unas vistas únicas y un itinerario histórico muy completo por sus numerosas dependencias interiores. Por otro lado, la propia montaña permite la realización de distintas rutas senderistas, siempre con el mar como majestuoso telón de fondo. Claro que para descubrir una experiencia natural en la que el Mediterráneo toma todo el protagonismo, nada mejor que subirse a algún pequeño ferry con destino a la Isla de Tabarca (perteneciente a Santa Pola pero muy cerca de la costa alicantina).Los apartamentos vacacionales en Alicante se adaptan a cualquier perfil de viajero, al igual que la oferta lúdica de la ciudad, y destacan entre la oferta de alojamientos. Por ejemplo, si se viaja con el propósito de conocer a fondo la cultura y la historia locales, la Concatedral de San Nicolás de Bari y la Basílica de Santa María no pueden faltar en la agenda de visitas. En un sentido más deportivo, el Museo de la Volvo Ocean Race es uno de los más completos del mundo sobre esta mítica prueba de vela. Claro que para llevarse el mejor sabor de boca nada más recomendable que catar platos locales tan notables como el arroz de marisco.